Cunden apagones en Tabasco
En una muestra de indignación y en busca de soluciones concretas, más de 50 padres de familia se congregaron la mañana de ayer frente la primaria ‘Benito Juárez’, ubicada en la ranchería Lázaro Cárdenas primera sección, Centro, como medida de protesta ante la persistente falta de energía eléctrica.
Los paterfamilias decidieron cerrar temporalmente la institución, denunciando la inacción de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) frente a esta problemática.
Los padres argumentan que el origen del conflicto radica en la insuficiente capacidad del transformador para abastecer tanto a la primaria como al jardín de niños.
“El recibo de CFE llega puntualito”
La ola de calor que azota a Tabasco ha llevado a los habitantes a enfrentar condiciones extremas, y Carmen no es la excepción. Su modesta vivienda, construida con láminas, se convierte en un horno al llegar la hora del mediodía.
Apenas cuenta con un ventilador que se convierte en una tortura al ponerlo en marcha durante el día, pero es durante la noche cuando más lo necesitan para descansar.
Sin embargo, afirma que los los apagones se han incrementado, transformando las noches en verdaderos “rostizadores”.
“Aquí en la ranchería Ixtacomitán enfrentamos constantes cortes de energía, pero los recibos de luz de la CFE llegan puntualitos, y si te atrasas en el pago te cortan”, dijo Carmen.
“La luz se fue desde el miércoles , pero ¿qué tal los recibos de luz?”, apuntó.
Salimos a agarrar fresco, pero hay mucho mosquito
El insoportable calor y la falta de electricidad han llevado a los residentes de la colonia Roberto Madrazo a tomar medidas desesperadas para sobrellevar la situación.
Los apagones que se registraron a partir del miércoles y jueves han obligado a los habitantes a salir a de sus viviendas a ‘tomar fresco’ , y también a ser picados por los mosquitos, pues la zona está rodeada de pantanos.
El miércoles, uno de los transformadores explotó, lo que provocó que varias casas se quedaran sin energía eléctrica; así han permanecido hasta este viernes.
“Tengo una niña pequeña, ellas es quien sufre las consecuencias de estas condiciones, ojalá y nos hagan caso”, dijo Clara, una habitante del lugar.